Un prócer de lujo, padre de la libertad de varios países hermanos, además del nuestro. Un hombre intachable, que a lo largo de toda su vida demostró ser merecedor de todo  respeto. La fecha recuerda su fallecimiento, pero su gesta será recordada por todos los que le debemos la independencia y la libertad, siempre.
El acto conmemorativo tuvo lugar en la Escuela Secundaria N° 2. Se encontraban presentes el Intendente Municipal Carlos Ferraris, la Secretaria de Gobierno Nancy Grimaldi, los Delegados Municipales de Alberdi, Alem y Fortín Acha, el Presidente del Concejo Deliberante  Omar Pagella y concejales, funcionarios municipales ,así como también la Inspectora Jefa Distrital Mavi Sábato y autoridades educativas y del Consejo Escolar, más por supuesto una nutrida concurrencia de familiares y vecinos.
Lucila García Faiez le puso su onda especial a la locución, que comenzó como siempre con el ingreso de las banderas de ceremonia de las distintas instituciones educativas y de bien público.
El Himno Nacional se entonó con ganas, sabiendo a quién iba dedicado esta vez.
La docente Valentina Citterio tuvo a continuación la tarea de recordar al Santo de la Espada con una reseña exacta y creativa, destacando su huella imborrable en nuestra historia, sus valores y principios fundamentales, respetando a todos los habitantes de la Nación, y dejando enseñanzas que en tiempos difíciles cobran especial relevancia, inspirándonos a sostener una sociedad donde la justicia y la igualdad sean norma.
Luego tomó la palabra el Intendente Ferraris, llevándonos a un recorrido importante por la vida de nuestro prócer máximo:
“Hoy no es feriado, pero están todos aquí, y eso no es poca cosa. El acto estaba planificado para llevarse a cabo en la Plazoleta que justamente lleva el nombre de San Martín, pero el clima lo hizo imposible, y la Escuela se puso a disposición para que pudiéramos hacerlo acá, en este hermoso SUM” 
“Hay mucho para hablar de San Martín, y es importante que lo hagamos. Veo a los chicos de secundaria y hasta me dan ganas de volver a dar clase. Pero este lugar que ocupo hoy con mucho orgullo me permite también brindarles algunos conceptos”
“Si nosotros no ponemos en valor al enorme Padre de la Patria que tenemos, ¿quién lo va a hacer, sino los que estamos acá, que venimos de la educación, de la política? Recién Valentina hizo un repaso de los ideales sanmartinianos, y algunos podrían pensar que ya no están de moda, que están lejanos en el tiempo. Pero la realidad es que sigue siendo tan vigente como en su época”
“San Martín nació en Argentina, pero de muy chico emigró a España, como era costumbre por entonces, para recibir una educación mejor que la que se podía brindar aquí. Y allí le fue muy bien, hizo una brillante carrera militar, cosechando logros en muchas batallas, y ganándose el respeto de sus superiores”
“En la Buenos Aires colonial, mientras tanto, crecían los temores de ataques de potencias extranjeras que buscaban alzarse con nuestras riquezas  y ocupar nuestro territorio. Es entonces cuando lo convocan para regresar y colaborar con la definitiva expulsión de los realistas españoles de nuestra incipiente patria” 
“Para sorpresa de los caballeros patricios que lo visitan, San Martín estaba muy al tanto de los hechos –cosa que por entonces, dada las distancias, era bastante raro- y aceptó inmediatamente volver a su tierra.”
“El proyecto inicial era armar una escuadra que aún hoy perdura, los Granaderos a Caballo, que serviría para defender solamente al entorno de la ciudad de Buenos Aires.  San Martín cumple con el encargo, y empieza al mismo tiempo a empaparse de la realidad sobre el terreno. Y sus granaderos reciben un bautismo de fuego inolvidable en la Batalla de San Lorenzo, con un triunfo aplastante en pocos minutos, gracias a la brillante capacidad estratégica del general”
“A partir de allí, el prócer se comienza a cuestionar la utilidad de seguir al frente de una tropa exclusivamente dedicada a proteger gente adinerada y encumbrada socialmente en una única ciudad, cuando el peligro podía venir de cualquier lado, más que nada en el Río de la Plata, que constituía por entonces en un botín valioso por su navegabilidad y su ubicación” 
“Comienza entonces a gestar lo que llamaría el Plan Continental,  que consistía en salir de Buenos Aires a buscar al enemigo, y recuperar los territorios americanos. Obviamente, a los vecinos porteños no le gustaron esos planes, y las diferencias de criterio hicieron que San Martín emigre hacia Mendoza. El gobierno central no lo apoya, pero sí se comprometen en su causa muchos pobladores de la región cuyana y otras, y rearma su ejército, esta vez no de élite sino sumando pobladores aborígenes, humildes paisanos, incluso mujeres –algo inaudito para su época- para llevar a cabo una de las proezas más grandes: cruzar los Andes y liberar de la opresión española a Chile. Hoy en día se estudia esa gesta en todo el mundo, comparándola con las de grandes estrategas como Aníbal, Alejandro Magno o Napoleón –con la enorme diferencia a favor de San Martín de que los demás cruzaron montañas para conquistar, no para liberar-“
“No se queda en Chile, rechazando todos los honores que le ofrecen. Sigue su campaña libertadora en Perú, en Venezuela junto a Bolívar, y en muchos frentes más. Como a todos aquellos que emprenden acciones colectivas, siguen surgiendo a su paso rivalidades, envidias  e intrigas, que le producen un tremendo desgaste, al punto de emigrar del país y no regresar jamás en vida”
“Muere en Francia, pero  nunca abandonó sus ideales y siempre rechazó honores y premios materiales. Nos deja un legado que debemos no sólo respetar y recordar cada año en esta fecha. Su impronta es de lucha por la igualdad, de darlo todo los demás. Hay mucha gente valiosa que hay que cuidar y valorar, para no tener que reconocerlos muchos años después de muertos”
“Por suerte, San Martín ha sido reconocido por las generaciones posteriores.  Y hoy descansa en nuestra patria. No lo olvidemos, estemos siempre orgullosos de él y reconozcamos sus valores y sus ideales imperecederos, que serán importantísimos para las batallas de todo tipo que la historia y el destino como país nos pongan delante”
A continuación, los chicos de la Primera Sección del Jardín 907 y el JIRIMM 3 nos deleitaron con su recreación del Campamento del Plumerillo, donde San Martín entrenó a sus tropas. Se entrecruzaron espadas de cartulina entres seños y aguerridos mini soldados;  junto a ellos, los peques de la  3° Sección del Jardín 907  nos contaron historias del rol de la mujer en las campañas sanmartinianas, como mensajeras, y algunas incluso disfrazadas de hombre para poder combatir.
Después, los alumnos de la Escuela Primaria N° 7 y su profe de música Adrián Zacconi nos hicieron una excelente dramatización de la arenga de San Martín a sus tropas, tan enérgica que casi nos dieron ganas de salir a la batalla a todos los presentes.
Los “más grandes” de 6° de la Escuela Primaria N° 3 leyeron por turnos una poesía alusiva, y se vino el cierre con una cueca de aquellas, “Contame otra vez”, interpretada por los chicos de las Escuelas Primarias N° 12 y 17 y el JIRIMM N° 5, dirigidos por el profe Zacconi que seguía personificando a San Martín, a quien también le gustaba tocar la guitarra en su escaso tiempo libre. 
Todos volvieron a sus tareas, a enseñar, a aprender, a ocupar sus puestos de trabajo, pero con un poquito más de ganas de seguir luchando como sea y desde donde sea para que este generoso país que nos alberga siga siendo el mejor del mundo. De nosotros depende.