Marines Yciz: “Soy Licenciada en Nutrición, trabajo en Vedia, Junín, Juan B. Alberdi, Germania y Leandro N. Alem, en todos los consultorios de manera privada. Decidí vacunarme por una cuestión de prevención, no sólo por mí y para mi trabajo, sino también por mi familia ya que estoy muy expuesta. Como también soy docente, en caso de que empiecen las clases, también es una manera de cuidar a los alumnos cuando volvamos a las aulas.

El día que me aplique la vacuna me sentí bárbaro, al segundo día sentí un leve dolor muscular, algo que está informado a la hora de vacunarse. Yo ya fui portadora de COVID-19 asintomática en el mes de octubre, pero decidí reforzar el cuidado por un posible rebrote y para cuidar a todos los pacientes que me visitan a diario y preservar la salud de mi familia.

Ahora estoy esperando la segunda dosis, que va a ser en febrero. Mi consejo es que todos se vacunen, si logramos que la cantidad de dosis llegue al menos a una vacuna por familia vamos a estar previniendo el 50% de los contagios durante este año”.